En el ajetreo diario encontrar momentos de tranquilidad y conexión con la naturaleza se ha vuelto más valioso que nunca. Entre las diversas prácticas que buscan proporcionar estos beneficios, los ‘Baños de Bosque’ o Shinrin Yoku, originarios de Japón, han capturado la atención por su impacto positivo en la salud física y mental.
La directora del Máster de Formación Permanente en Ecología Urbana e Infraestructura Verde de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR), Susana Domínguez Lerena menciona que, los beneficios fisiológicos y psicológicos de los baños de bosque son respaldados por estudios científicos. Los médicos en Japón y Finlandia lo recetan como terapia para superar enfermedades. Este reconocimiento oficial destaca la efectividad de esta práctica ancestral.
La experta de UNIR, Domínguez Lerena menciona que, los baños del bosque ofrecen múltiples beneficios, entre ellos: reduce las hormonas del estrés, aumenta la capacidad de relajación, disminuye la presión arterial baja y alta, alivia la tensión y mejora el estado de ánimo e impulsa el sistema inmunitario. También produce una serie de beneficios indirectos ya que aumenta la producción de proteínas preventivas del cáncer, alivia condiciones estresantes como la depresión, mejora el vigor, la vitalidad y la energía, mejora los síntomas subjetivos del dolor físico y mejora la condición física y la memoria.
La práctica del Shinrin Yoku implica recuperar a biolfilia, es decir, reconectar con esta necesidad como individuo y poder sentir y recuperar esas sensaciones perdidas al sumergirse relajadamente en la atmósfera de un bosque. Susana Domínguez Lerena menciona los aspectos claves necesarios para esta técnica revolucionaria:
Tener un entorno propicio para los baños de bosque: debe ser tranquilo, sin ruido estridente, con presencia de árboles, agua, plantas aromáticas y un ambiente que estimule los sentidos: olor, tacto, vista y oído.
Es preferible que se realice por la mañana temprano o al final del día: hasta con 15 minutos al día se puede experimentar un cambio notable en el bienestar.
En un mundo afectado por el estrés urbano y agendas ocupadas, la conexión con la naturaleza se vuelve esencial para la salud mental. Los baños de bosque proporcionan un refugio donde las personas pueden relajarse, creando un equilibrio vital. Los baños están recomendados para aquellos que buscan reposar y recargar energías. La práctica se convierte en un refugio rejuvenecedor, un escape de la vida agobiante de la ciudad.
Los ‘Baños de Bosque’ no son solo una moda pasajera; representan un recordatorio valioso de la importancia de la conexión humana con la naturaleza. En un mundo acelerado, las experiencias simples pero poderosas ofrecen una pausa necesaria para recargar, rejuvenecer y reconectar con nuestro entorno natural.